¿Necesitas servicios de desinfestación de insectos y roedores a domicilio?
¡Hay pocas cosas peores que ver una plaga de insectos viviendo en tu cocina o despensa! Además de ser desagradable, existe el peligro de contaminar los alimentos y transmitir enfermedades a personas y animales domésticos.
Puede ser difícil detectar la presencia de estos insectos o roedores, que generalmente operan de noche, escondiéndose de la presencia humana. Pero acaban siendo tan numerosos y reproduciéndose tan rápido que no existe ningún remedio casero para controlarlos. En estos casos, es realmente necesario llamar a un especialista en desinfestación.
Los aerosoles insecticidas, los repelentes de vinagre, las velas de citronela u otras técnicas de aficionado pueden proteger a algunos insectos, pero no evitarán que se refugien en las tuberías de ventilación o plomería, grietas en la madera u otros escondites. Incluso si ocultan temporalmente el problema, no lo resolverán e incluso pueden causar futuras infestaciones.
7 consejos para una desinfestación completa
Todos queremos vivir en un ambiente seguro y saludable libre de plagas. Limpiar y desinfectar toda la casa es el primer paso para prevenir la aparición de estas plagas. Antes de llamar para la desinfestación, tome nota de nuestros consejos para mantener su hogar libre de plagas.
Limpia con frecuencia todas las áreas de la casa, sin olvidar debajo de los muebles y electrodomésticos. Presta especial atención a los lugares donde guardas los alimentos como la cocina y la despensa. Al igual que nosotros, los insectos y los roedores necesitan agua, alimento y refugio para sobrevivir y de ahí es de donde los obtienen.
Cuando vaya de compras, inspeccione los empaques en busca de ingredientes como harinas, cereales, nueces, semillas, etc. Estas materias primas son a menudo la fuente de la infestación y transportan las larvas desde los silos o fábricas donde se producen hasta su hogar. Después de la inspección, almacene los alimentos sin abrir en recipientes herméticos y en un lugar seco.
Esté atento a señales de suciedad inesperada, marcas en paredes o muebles, heces y orina de animales, o ruidos inexplicables. Estos son signos de que es necesario realizar una desinfestación, incluso cuando los insectos no son visibles.
Cuidado con el agua estancada. Las plantas tienen el poder de capturar oxígeno y proporcionar un ambiente agradable. Sin embargo, también pueden atraer a algunas especies de insectos. No deje agua estancada en floreros, así como en bebederos para pájaros, perros, gatos u otras mascotas. Limpiar periódicamente bajantes, balcones, patios o jardines.
Evite la chatarra. Para una limpieza más eficaz, evita acumular objetos que ya no utilizas: juguetes, papeles, objetos de decoración, tapicería vieja, vajilla sucia, electrodomésticos rotos, etc. Todo esto es un refugio potencial para chinches, pulgas, cucarachas o incluso ratones y ratas. Guarda todo lo que no necesites en cajas bien cerradas.
Proteja las entradas a la casa. Cualquiera que viva en entornos rurales o cerca de lagos y estanques sabe que instalar mosquiteras en las ventanas es una excelente protección contra moscas y mosquitos. También coloque una red alrededor de la cama para noches libres de picaduras. También verifique si necesita sellar las grietas en las paredes y los marcos de las ventanas, y use calafateo en las puertas para evitar la entrada de bichos como las cucarachas. Los lugares húmedos, como los desagües de las duchas y los lavabos, deben limpiarse con frecuencia con productos desinfectantes.
Cada plaga tiene sus propios hábitos y especificidades, por eso es tan importante llamar a un especialista para eliminarla correctamente, sin poner en peligro la salud humana y para evitar reinfestaciones. Además, hay que tener cuidado durante todo el año, no solo en verano, cuando las infestaciones son más notorias. Muchas especies hibernan o permanecen dormidas dentro de sus nidos durante los meses más fríos, reapareciendo en la temporada siguiente llenas de apetito.
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